viernes, 29 de marzo de 2013

Semana santa... y gastronomía...



Esta semana santa se supone que iba  a ser de movimiento continuo y experiencias varia pero... el resumen ha sido, lluvia, lluvia y más lluvia. Empezamos el domingo de Ramos de maravilla, al empezar la mañana borriquita y despues al mediodía, paseo por tabernas tradicionales de San Lorenzo, buen vino y tapas tradicionales, la verdad no estuvo mal. El resto de la semana la experiencia gastronómica fue más hogareña, pero eso sí, nada mala... El jueves por fin!!! un rayito de sol y a la calle desde bien temprano, primera parada Sojo fusión en donde me pusieron un buen vino y una tapita que para mi gusto estaba llena de pretensiones pero sin llegar a conseguirlas, era una especie de patatas bravas, un masacote copacto y crujiente por fuera y patatas duras dentro, no estaba mala el concepto pero... la ejecución para mi nada buena... pero se pudo perdonar ya que tuvimos buen servicio y unas vistas excepcionales. Seguimos andando hasta llegar a la plaza de las cañas, otro vinito... pero en este caso no hubo tapa y el vino para mi gusto un poco alto de temperatura.. Seguimos andando y paramos en S. Lorenzo donde comimos un cartuchito de gambitas orly, que me sorprendieron... este lugar es nuevo una freiduría para llevar y tomar de pie cartuchitos de pescado, el local a mi parecer podían haberlo aprovechado un poquito más para que la gente se pare y tapee algo rápido, pero el pescado muy bien hecho y bastante bueno de calidad... Más tarde intentamos entrar en la cazuela de S. Lorenzo que por desgracia no pudimos ya que estaba todo lleno y solo aceptaban reservas, así que quedaba pendiente... Seguimos andando dirección ayuntamiento y paramos en uno de toda la vida pero que a mi personalmente no me gustó jamás, el Rafalete... tengo que decir que si antes no me gustaba ahora aun menos, de hecho me marché de alli con una sensación bastante mala en mi estómago... una berenjenas aceitosas y con un fuerte sabor a pescado... unos pinchitos de cerdo totalmente crudos y sin sabor... asi que... para que continuar ... no lo recomiendo y por mi parte creo que será la ultima vez que lo visite. Así que nada lo intentamos arreglar comiendo un magnifico helado de casa rubio, que tantos y tantos recuerdos de mi infancia me trae... ayyy!!! cuantos helados pude comer de pequeña allí con mi maravillosa abuela... en mi recuerdo queda el polo de mantecado jajaja ahí lo dejo... hasta pronto,

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